Esta ocasión, Karen Livier vuelve a escribir en el blog (ya lo había hecho con BLACK SWAN) sobre una película independiente que vale la pena ver. Tiene buena historia, buenos actores y un excelente soundtrack. Espero les guste.
Karen, muchas gracias por escribir.
Drive (“El conductor”) es la nueva película del director Nicolas Winding Refn, quien es relativamente poco conocido en el ámbito cinematográfico del continente americano. Windidng es de origen danés y sus filmes destacan, citado por él en una entrevista, como “filmes basados en los instintos” (movies made on instincts). Su proyecto cinematográfico más conocido es la trilogía Pusher (Un paseo por el abismo, 1996), cuya historia se trata de un vendedor de droga que tiene que eludir a la policía para pagar una deuda.
El guión de Drive está basado en una novela del escritor James Sallis, este proyecto estuvo estancado durante seis años. Hasta que los Estudios Universal lo retoman con el objetivo de hacer un filme de acción parecido a la franquicia de Rápido y Furioso, bajo el mando del director Neil Marshall (Doomsday) y con Hugh Jackman (X-men) como protagonista. Sin embargo, este proyecto es suspendido por razones desconocidas, y lo retoma el actor Ryan Gosling (Blue Valentine); quien se encarga de contactar y traer al director danés Winding. Esto es un datos curioso e importante, ya que la mancuerna que hicieron influyó en gran medida sobre el resultado final de esta película.
La trama se basa en un hombre llamado “driver” (Ryan Gosling) un personaje sin nombre dentro de la película; al cual se refieren los demás personajes como “driver” (conductor), o como “the kid” (incluso hasta en los créditos finales aparece sin nombre). Un hombre solitario que tiene varios trabajos que involucran la conducción de autos a gran velocidad. Podemos verlo de día trabajando en un taller mecánico y en ocasiones como stunt de doblaje para escenas de acción con autos para películas de Hollywood; otras noches cobra por ayudar a escapar a ladrones del lugar donde cometen algún delito en menos de cinco minutos. No tiene relaciones amorosas y solo se le conoce un amigo, Shannon (Bryan Cranston, Breaking Bad), para quien trabaja en el taller mecánico. Su vida cambia cuando conoce a su vecina Irene (Carey Mulligan, An Education) y a su hijo, quienes viven solos esperando la llegada de su esposo que se encuentra en la cárcel. Todo esto sucede mientras Shannon está tratando de establecer un equipo de carreras con el dinero del hampa a través del mafioso Bernie Rose (Albert Brooks, The Muse), utilizando al Conductor como el principal motor del equipo de carreras. Sin embargo todo empeora cuando el esposo de Irene sale de la cárcel.
Este filme pertenece al género neo noir (nuevo cine negro), es importante antes de hablar sobre la película entender este término. El cine negro (film noir) se usa para describir películas cuya trama gira en torno a hechos criminales y/o delictivos, con fuerte contenido expresivo y una estética visual característica. El guión suele manejar un lenguaje elíptico y metafórico, donde se mezclan escenas con iluminación oscura con sombras para exaltar la personalidad de los personajes. Cabe señalar que la personalidad de los personajes, así como su motivación interna, son difíciles de establecer. La frontera entre buenos y malos no existe, se difumina, encontramos héroes cuyo pasado oscuro los vuelve antihéroes. El cine negro nos muestra una sociedad violenta, cínica, corrompida que amenaza no sólo al héroe o protagonista, sino también a los otros personajes, dentro de un ambiente de pesimismo fatalista. Los filmes dentro de este género suelen tener finales no felices, sino agridulces o fatalistas. Otro punto importante del cine negro es la presencia de una mujer fatal (femme fatal) que aparentemente inofensiva, suele conducir al protagonista la peligro, fracaso o a la muerte.
El filme cuenta con muchas secuencias lentas donde apreciamos a los personajes “estando” sin hablar, sin hacer algo en específico; o vemos al protagonista simplemente conduciendo por la ciudad de Los Ángeles. Quizás estas secuencias a muchos les puedan parecer aburridas o tediosas, pero es donde, a mi parecer, encontramos la belleza de esta película. La dirección artística es muy realista, todos los actores transmiten en silencio la oscuridad y dolor interno de sus personajes. Ryan Gosling en esta ocasión (casi siempre lo hace) se empapa en la piel de este personaje solitario, enigmático, intenso, que da la impresión de que es impulsivo y arrebatado, pero todo lo hace con extrema cautela y precisión. A pesar de su intrepidez, cuida y mide cada uno de sus actos, como si esta precaución la hubiera adquirido debido a un pasado (que nunca nos enteramos) oscuro. Esto lo deduzco por la forma en cómo se relaciona, confronta y resuelve el conflicto desatado con la mafia, aún sin haberlo causado directamente para salvar a su musa Irene y a su hijo. Ante ellos pierde la frigidez y frialdad de su rostro, cada vez que los ve y convive con ellos, su rostro se ilumina sin necesidad de expresarlo en palabras, vemos a un hombre apasionado en busca del bien común cuando se trata de aquellos que tocan su alma.
Cabe resaltar que los actores de reparto como Albert Brooks (nominado y ganador de varios premios) en el papel de Bernie y Bryan Cranston como Shannon, son un plus que complementa esta historia.
Un dato curioso es que a pesar de que el director nunca había estado en la ciudad de Los Ángeles, las escenas nocturnas en la ciudad fueron grabadas con gran realismo. Unos días antes de empezar a filmar, Ryan Gosling salía con el director por las noches y conducían sin rumbo por la ciudad, escuchando música hasta la madrugada; lo cual siguieron haciendo a la par durante la filmación. Quizás esta experiencia hizo que el director y Ryan se conectaran y transmitieran lo que proyectan en el filme: una gran historia.
La dirección es impecable, se nota la dedicación del director por cuidar cada uno de los cuadros, sobre todo en las secuencias de acción y de violencia, como la escena en el baño del hotel donde se esconden de la mafia (no les contaré qué pasa).
Es una lástima que esta película por ser de carácter independiente y de contenido violento, poco convencional, haya pasado desapercibida en los premios Oscar, solo está nominada para mejor “Logro en edición de sonido”. Sin embargo, en el festival Cannes, Winding ganó como Mejor Director y la película fue nominada para la Palma de Oro. En los premios Critic Films Awards ganó como Mejor Película de acción. Winding también fue premiado como Mejor Director por los Críticos de Cine de Toronto, por la Sociedad de Críticos de San Diego, así como por los premios Austin Films. Ganó el premio de Mejor Guión Adaptado en los premios Austin Films y nominada como Mejor Película por la Sociedad de Críticos de Cine de Austin. Cliff Martínez recibió el premio de Mejor Música Original por la Asociación de Críticos de Chicago (CFCA) y también fue premiado por la Sociedad de Críticos de Boston; también Albert Brooks ganó como mejor actor de reparto en estos premios. Los premios BAFTA (British Academy Film Awards) la nominaron como Mejor Película, Mejor Dirección y Mejor Edición.
Este guión sencillo pero complejo en profundidad, dirección impecable, buena dirección artística y buena fotografía, son acompañados majestuosamente de un gran soundtrack. El score musical está a cargo de Cliff Martínez, a quien le conocemos su trabajo en películas como Traffic, Solaris, Wonderland, Wicker Park, The Fifth Element, entre otras. La canción Nightcall interpretada por Kavinsky & Lovefoxxx a pesar de no ser nueva, se volverá una referencia para recordar esta película que estoy segura se volverá de culto. Parafraseando el coro “There is something inside you….. It’s hard to explain….. There talking about you….. boy…. But you’re still the same”, nos remite a la personalidad del protagonista, “hay algo dentro de ti….. difícil de explicar….. ellos hablan de ti….. niño….. pero tú sigues siendo el mismo”. Este hombre aparentemente frío que en su interior tiene mucho que dar, a pesar de que lo quieren corromper y usar como objeto para saciar sus bolsillos, sigue siendo él sin dejarse corromper, no pierde su esencia, sus valores, su sistema de creencias, su autenticidad. No está peleado con el mal, convive con él sin dejarse corromper, es eso lo que Irene ve en él y por lo que le permite entrar en su vida, sin embargo la mala fortuna les impide consumar este encuentro fugaz pero eterno.
Drive es un filme magnético, excitante y frío; de poco contenido pero visualmente estético. Es una historia de cine negro que busca expresar más que impresionar. Citando al director es como “un cuento de hadas oscuro donde existe un héroe mitológico tipo John Wayne que viene a proteger a los inocentes del mal que hacen los hombres, al mismo tiempo exorciza sus demonios sacrificándose él mismo” (entrevista youtube 2012); esto me recuerda al filme Taxi Driver (Martin Scorcese). En el intento por estar con ella por siempre, aun cuando solo hubo un beso entre ellos (gran escena) y pocos encuentros, lucha contra todo aquello que implique peligro para su musa y el hijo de ésta. Así el protagonista logra salvar a su amada pero fracasa en el intento de estar con ella, aquí intuimos en la escena final que el conductor huye sin rumbo para morir en le camino y así seguir protegiendo a su amada.
Siguiendo la tradición de este blog, yo le pongo un 9 y tu?