ABEL

No soy muy aficionado al cine mexicano, mis razones las expondré en otra ocasión. Sin embargo, debido a que en estos momentos la cartelera no ofrece muchas opciones, decidí ver está película y salí de la sala de cine con un grato sabor de boca.

Seguramente mucha gente lo sabe, la película es dirigida por Diego Luna quien en 2007 decidió probar suerte en la dirección cinematográfica con un documental sobre Julio César Chávez. Ahora, debuta en la realización de un largometraje de ficción con Abel.

A la película le fue bien en festivales importantes, en enero formó parte del Festival de Sundance, en donde se proyectó por primera vez a la crítica. Posteriormente, en la Selección Oficial del Festival de Cannes. El film recibió buenas críticas de los medios franceses, elogiando el trabajo como director de Luna e incluso comparándolo con Michel Gondry y Wes Anderson (Punto en el que evidentemente no estoy de acuerdo, toda vez que Diego Luna no les llega ni a los talones a estos dos directores; Michel Gondry y Wes Anderson son dos directores reconocidos mundialmente y con mucho más trayectoria que el mexicano, vamos no son ni siquiera comparables).

A su estreno en México, debutó con 63 copias y rompió récord de taquilla al tratarse de una película con menos de 65 copias y vender más de tres millones de pesos en su primer fin de semana (no está mal para una película mexicana). Uno de los muchos problemas del cine mexicano, (tema que como dije anteriormente, hablaré de él en otra ocasión) es que los exhibidores solo las proyectan en pocas salas porque prefieren poner en cartelera cintas más comerciales (generalmente Estadounidenses) que se puedan vender mejor.

Dentro de los productores se encuentra John Malkovich quien tiene una buena amistad con Diego Luna. Creo que las actuaciones son buenas a secas, las más destacables para mi gusto son las de Karina Gidi (interpretando a la madre de Abel) y la del niño Christopher Ruiz Esparza, (quién interpreta a Abel) el cual fue escogido de un casting entre 400 niños. Lo hace muy bien, pues es muy difícil que un niño pueda interpretar con cierta naturalidad a un adulto, macho, y que fue educado a la antigua escuela.

No hay mucho que decir de la fotografía, ni de la música. Lo que mas me gusta es la historia, la cual fue escrita por Augusto Mendoza y Diego Luna, porque es muy humana, entrañable y real. La historia cuestiona la paternidad, es una reflexión de la compleja relación entre padres e hijos, el rol de la madre en la sociedad mexicana, el impulso que los niños sienten de proteger a sus madres y que muchas veces los adultos presionamos a los niños para que actúen como adultos. A pesar de que son temas difíciles, Luna logra que la película sea muy amena, proporciona momentos de humor y al mismo tiempo, dramatismo, sutilmente.

Es un retrato en torno a un niño de aproximadamente diez años, quien es autista y padece un severo trastorno emocional, quien al salir de una breve estancia de un hospital psiquiátrico, toma las riendas de la casa familiar, como si en realidad fuera un adulto, se convierte en el padre de su hermana adolescente y de su hermano menor, lo cómico y perverso a la vez es que se cree el esposo de su madre.

Creo que la primera mitad de la cinta es de mayor calidad que la segunda pero en términos generales cumple con su objetivo.

Otros puntos importantes y que aplaudo son: 1) Que la película tenga una temática diferente a la habitual del cine mexicano, 2) que es hasta cierto punto universal, porque cualquier extranjero la puede ver, entender e identificarse con algún personaje o la historia. 3) Agradezco que tenga un protagonista infantil, ya que hay pocas películas que lo hacen en México.

Abel es un buen inicio para Diego Luna en esta faceta de director y vale la pena verla aunque sea una vez.

Le pongo un 5. ¿Y tú?